Mientras miramos a nuestros vecinos del norte con ojos envidiosos, mientras soñamos con bajas de maternidad o paternidad dignas, lo cierto es que los que ya hemos tenido a nuestros hijos nunca vamos a ver ni un día más allá de la miserable baja de mater-paternidad que nos ha tocado. Y por mucha rabia que nos dé, por mucho que de repente soñemos con ser rubios finlandeses de paisajes helados, lo cierto es que, por lo menos para esta ocasión, nos vamos a quedar con nuestra melena morena, nuestro clima mediterráneo y nuestra baja de 16 semanas, mirando a nuestro bebé que apenas acaba de empezar a aguantar la cabeza y echarse unas risas y pensando cuál es la mejor opción para él si tenemos que volver al trabajo irremediablemente.
La guardería es la opción más común y conocida, pero también la que suele crearnos más reticencias, sobre todo cuando los niños son aún muy pequeños, con un sistema inmune aún débil y con muy poca autonomía. Por suerte hay muchas otras opciones para aquél que quiera o prefiera un entorno más íntimo o personalizado en el que dejar a sus hijos.
Abuelas y abuelos
Debería escribir páginas y páginas de alabanzas y gratitud inmensa hacia ellos. Mis hijas les deben parte de su infancia y su felicidad (y yo parte de mi salud mental 😉 ). Si tienes la suerte de tenerlos cerca, en buena forma, y dispuestos, no hay mejor opción. El vínculo entre abuelos y nietos es indescriptible, ellos son capaces de dar lo mejor de sí mismos con una sonrisa en la cara de oreja a oreja, de llevarlos al parque, de tirarse en el suelo a hacer puzles, o de cocinarles como sólo ellos saben hacer.
Madres de día
Explicado de forma muy breve porque les dedicaremos un artículo completo más adelante, las madres de día son mujeres con experiencia (normalmente madres) que acogen un número muy reducido de niños (por lo general 3 pero depende de las edades de los niños) en su propio hogar, siempre adaptado para los más pequeños.
Grupos de crianza compartida
Todo aquél que deje de trabajar para criar a sus hijos debe saber que no está condenado a la soledad de casa ni a sus 4 paredes 😉 . Existen grupos de crianza que no son más que varias familias que se reúnen en un espacio compartido donde sus hijos pueden jugar y relacionarse y los padres y madres pueden compartir su experiencia de crianza. Normalmente estos grupos están dirigidos por psicopedagogos, o personal con experiencia para hacer más exitosa y completa la experiencia. Hay grupos de crianza que surgen de forma natural y grupos más organizados y especializados, con local propio, personal contratado, etcétera.
Canguro en casa
Tú pones la casa y contratas a alguien en las condiciones y horario acordado. Es quizá la opción más cara, aunque el trato es 100% personalizado.
Guardería en casa
Conozco un par de personas que escogieron esta opción y me parece que es la que más aúna la “facilidad” de las guarderías para personas con horario poco flexible, un precio asequible, atención personalizada, y todas las ventajas de socialización temprana que tiene el contacto con otros niños.
Se trata de organizar la guardería en tu propia casa con un par de niños más cuyos padres necesiten o tengan las mismas premisas educacionales que vosotros y contratar a un cuidador que se encargue de ellos en vuestro propio hogar. Las personas que conozco utilizaron este sistema para criar a sus hijos hasta los 3 años (alternaban las casas cada mes) y no pueden estar más contentos del resultado 😉
Guardería en el trabajo
Este caso parece más complicado pero no es para nada imposible. Si hay varias personas en el trabajo con las mismas necesidades y con niños de edades aproximadas, y contáis con un espacio donde los niños puedan estar de forma segura, es una opción a tener muy en cuenta. Te ofrece la proximidad de tus hijos (por ejemplo si das el pecho), el trato personalizado, un precio asequible, la socialización con otros niños, y la comodidad (y alegría) de disponer de tus hijos en la habitación de al lado mientras trabajas… No está mal, ¿Eh? 😉
Seguro que me dejo alguna alternativa en el tintero 😉 . Pero lo cierto es que la misión principal de este artículo es principalmente señalar que hay vida más allá de las guarderías, que no todo acaba ni empieza en ellas, que hay muchos modelos de familia y educación, y que si buscamos podemos encontrar uno que se adapte mejor a nuestras necesidades. Así que no te rindas, echa un vistazo por la red, pregunta a otras madres y padres, investiga un poco hasta dar con la forma en la que te sientas más cómodo, a gusto y feliz, y en la que creas que tu hijo se educará y se criará en un entorno más favorable 🙂